Juan Carlos Galindo, invitado especial a la última Comisión de la AEECF 2022

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Hoy 14 de diciembre de 2022 tuvo lugar la 4ª Comisión de Asociados de 2022 de la Asociación Española de Empresas contra el Fraude, que se celebró una vez más de forma telemática y con gran éxito de convocatoria.

Este encuentro anual de asociados fue aperturado por César Gilmartín, Director de Operaciones de la Asociación,  que dio la bienvenida a los asistentes y presentó a Juan Carlos Galindo, invitado especial a esta última Comisión del año , experto en ciberfraude y autor de la exitosa obra Ciberestafas.

Los asociados, que habían recibido ejemplares de Ciberestafas durante el mes de noviembre, tuvieron la oportunidad de escuchar a este referente en materia de ciberdelincuencia e intercambiar impresiones con él.

Durante su ponencia “Fraude Online: desde la perspectiva del defraudador, del defraudado y de la entidad” se compartieron datos, casos reales realmente interesantes y conclusiones muy a tener en cuenta.

Entre ellas llamó la atención la forma de trabajar del cibercrímen, que lejos de materializarse en un encapuchado escondido en un garaje, toma ya la forma de call center organizado donde sus miembros tienen incluso objetivos de venta por canal. También los irrisorios precios por los que en la dark web se puede adquirir una cuenta de Gmail, de Paypal o los datos de una tarjeta bancaria. O usurpar la identidad con pasaportes y permisos de conducir prácticamente idénticos a los reales si los ojos que los miran no son los de un experto en ciberfraude.

Galindo alertó también de que la ingeniería social, cada vez más sofisticada, consigue que hasta las personas que están sensibilizadas, concienciadas y familiarizadas con la ciberestafa caigan en sus redes. Y de que la tendencia va in crescendo en 2023, con nuevas fórmulas que acecharán a la sociedad.

También se expuso el problema de las políticas reactivas ante el ciberfraude en nuestro país, en contra de la proactividad de otros países, y de la delicada situación de las entidades ante sentencias que las condenan a pagar las ciberestafas de terceros, “por no disponer de medios de prevención suficientes”, con la merma reputacional que esto además supone.

Para concluir, Gilmartín clausuró oficialmente el año 2022 y destacó una vez más la importancia de la Asociación en la lucha contra el fraude como un punto de encuentro para compartir datos y conocimiento entre asociados de diferentes sectores de actividad, animando a continuar con esta importante labor.

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