Cada vez más ingenio en la suplantación de identidad

Con la repentina necesidad de hacerlo todo en el mundo digital, han proliferado nuevas formas de hacerse pasar por otra persona con diferentes objetivos: obtener datos de forma ilegal o cometer algún tipo de estafa, como por ejemplo utilizar esos datos robados para pedir un préstamo.  

La Ley no establece un castigo homogéneo en el caso de una suplantación de identidad, sino que trata cada caso particular y valora penas y sanciones en función de la acción concreta y las consecuencias y daños causados.

La suplantación de identidad puede ocurrir dentro y fuera de la red. Numerosas casuísticas son las registradas por las autoridades pertinentes, os dejamos aquí algunos de los casos más frecuentes:

Offline

• Cuidado si extravías el DNI. Denuncia inmediatamente y revisa que no se esté utilizando tu identidad con fines fraudulentos. 
• La duplicación de la SIM del teléfono es también muy peligros ahora que validamos muchas transacciones con mensajes recibos en nuestro número de teléfono móvil. Si empiezas a tener problemas con tu red, ponte en contacto con tu operado de telefonía móvil de forma inmediata. 
• La firma de cada persona es como la contraseña. Evita firmas sencillas de falsificar para evitar sustos.
• Atención cuando pagues con la tarjeta, te la pueden clonar, almacenar su información y luego utilizarla. El Pin solo a tu vista.
• Atención con las llamadas telefónicas que solicitan datos personales y bancarios con alguna oferta de servicio. Nunca facilites tus claves por teléfono.
• Cuidado con el móvil ya que es una fuente increíble de información personal que los estafadores saben explotar.

Online

• Comprueba que el entorno en el que navegas es seguro (https) y con el candado en la barra de navegación.
• Si ves cualquier irregularidad en tus redes sociales o email, cambias tus contraseñas inmediatamente, pueden habértelas robado. 
• Utiliza contraseñas fuertes y renuévalas cada cierto tiempo.
• Atención con el phising: no introduzcas tus datos personales y bancarios en entornos digitales ni enlaces sospechosos.
• Revisa la política de privacidad y las condiciones del servicio al que estás accediendo.
• Evita las redes Wi-Fi públicas o que no sean de confianza.