Las empresas cada día se enfrentan a un incremento de fraude. Un hecho que se ve agravado debido a las diferentes técnicas y formatos para cometer este acto delictivo, que existen en la actualidad. Así, las compañías se hallan en una situación vulnerable, debiendo trabajar rigurosamente para reducir el riesgo de sufrir cualquier tipo de fraude.
Volkswagen Financial Services se encontraba entre las empresas españolas que habían visto un incremento en sus niveles de fraude, por lo que decidió tomar soluciones para atajar el problema.
Jesús Salafranca Cabieces, Responsable del Departamento Contencioso en la compañía y miembro de la Asociación Española de Empresas Contra el Fraude (AEECF) explica que “la exposición al fraude es una realidad en nuestras empresas” a lo que añade “existe una vulnerabilidad en los procesos de admisión de los créditos, que cada compañía intenta atajar a través de métodos de detección internos. Estos métodos no resultan suficientes”.
Así fue como se convirtió en una de las primeras empresas en tomar la decisión de compartir datos de fraude. Actualmente, ya hay seis miembros del sector financiero del automóvil que trabajan conjuntamente para compartir la información necesaria que les permita luchar contra el fraude. Estos son, además de Volkswagen, Toyota Financial Services, Honda Finance España, PSA Finance, Fiat y RCI Bank and Services España.
El objetivo de compartir datos de fraude es la detección y prevención del mismo en el momento de la solicitud, a través del intercambio de datos no competitivos. Un mecanismo de trabajo basado en el principio de reciprocidad en el que los distintos miembros participantes contribuyen compartiendo datos sin que ello afecte a la competencia de las distintas empresas. Esto permite detectar intentos de fraude en el sector sin necesidad de revelar ninguna información comercial sensible.
En palabras de Jesús: “Nosotros creemos que la lucha contra el fraude es un problema de todos y consideramos que compartiendo cada uno de nuestros fraudes detectados o sufridos favorecemos a una herramienta de prevención para el resto de participantes”.
Este escenario esperanzador indica que frenar el fraude es posible y que en el camino de su prevención y detección se hace necesario compartir datos de fraudes detectados o sufridos con el resto de compañías del sector o incluso de otros sectores.